cuarenta y nueve
Como recompensa a las interminables jornadas de trabajo que concluirían el miércoles pasado con un encuentro en el que Los Emperadores se mostraron entusiastas y complacientes, contrastando radicalmente con la última vez que nos vimos, ayer decidí tomarme el día libre.
Dormí hasta tarde y tras desayunar una ensalada de pasta, y un litro de agua con gas, bajé al centro a dar un paseo. El viento soplaba fuerte y a media tarde, una vez terminados los recados que tenía por hacer, me senté en una cafetería a ver llover mientras llegaba la hora de ver a El Auténtico Walter.
Afuera llovía intermitentemente, y en algún interior de la ciudad nosotros improvisábamos algo para cenar. Walter Petrovsky llegó justo a tiempo de unirse al plan y ahí estuvimos hasta tarde, hablando de nada en especial, como es costumbre entre nosotros.
Dormí hasta tarde y tras desayunar una ensalada de pasta, y un litro de agua con gas, bajé al centro a dar un paseo. El viento soplaba fuerte y a media tarde, una vez terminados los recados que tenía por hacer, me senté en una cafetería a ver llover mientras llegaba la hora de ver a El Auténtico Walter.
Afuera llovía intermitentemente, y en algún interior de la ciudad nosotros improvisábamos algo para cenar. Walter Petrovsky llegó justo a tiempo de unirse al plan y ahí estuvimos hasta tarde, hablando de nada en especial, como es costumbre entre nosotros.
3 Comments:
La otra tarde vi llover
Vi gente correr
Y no estabas tú...
Watekeamos tomorrow?
siiiiiiiiiiiiiiiii!
Greets to the webmaster of this wonderful site! Keep up the good work. Thanks.
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