setenta y cuatro
Vengo de ver a mi madre. Anoche cenamos juntos y me contó lo mucho que había disfrutado de sus vacaciones de Semana Santa. Como estábamos muy relajados, después de cenar nos pusimos a ver cualquier cosa en la tele a medida que se hacía cada vez más tarde. Se estaba tan bien que decidí pasar la noche ahí, cosa que no hago muy a menudo desde que dejamos de vivir juntos y que sé que a ella, aunque intente disimularlo, le hace ilusión.
Esta mañana, sólo después de resintonizar los canales de la tele, clavar una pata al sofá del salón, oir cuatro veces que no arrastrara los pies, bajar dos cajas al trastero, cambiar el agua a los agapornis y colgar un espejito en el baño, pude por fin escapar, no sin antes pedirme que aprovechando el viaje hasta aquí, me acercara a su banco en un momentico a consignar un cheque en su cuenta.
Como en el fondo no me suponía mucho jaleo, accedí y eso me dio derecho a recompensarme en el bar de la esquina desayunando lo de siempre mientras pensaba en la agradable sensación de cuando todo empieza otra vez.
Esta mañana, sólo después de resintonizar los canales de la tele, clavar una pata al sofá del salón, oir cuatro veces que no arrastrara los pies, bajar dos cajas al trastero, cambiar el agua a los agapornis y colgar un espejito en el baño, pude por fin escapar, no sin antes pedirme que aprovechando el viaje hasta aquí, me acercara a su banco en un momentico a consignar un cheque en su cuenta.
Como en el fondo no me suponía mucho jaleo, accedí y eso me dio derecho a recompensarme en el bar de la esquina desayunando lo de siempre mientras pensaba en la agradable sensación de cuando todo empieza otra vez.
6 Comments:
ASI ES, volvemos a ser lo mismo.
Cuando la rutina y las respuestas parecen que por algun motivo van a cambiar, solo falta darle un poquito mas de tiempo para ver que siguen siendo las mismas. Pero al fin y al cabo lo único que buscamos es ilusionarnos y creernos ese instante.
Buenos dias uno!
Asín son las madres... Pero pero hay cosas que no me cuadran...
Gogore; que razón tienes con eso de que las cosas son siempre las mismas, pero también es verdad que depende del ojo con el uno las mire. Por eso yo, cuando empiezo a ver todo torcido, voy corriendo a ponerme las gafas.
Tele; que ilu que te dejes caer por aquí! El Sábado me lo pasé muy bien, así, en plan tranqui charlando y opinando. La habría seguido, pero habrás leido hacia dónde está dirigida mi energía...y lo que no te cuadra...tú pregunta...
Xabi; me se ocurrió que para autosugestionarme durante los setenta y muchos días de encierro que me quedan, voy a usar este chisme como terapia. De ahí el giro. Qué gracia/susto lo de la afoto; pero supongo que si es rollo colegio saldré vestido ;-))
A mí también me llegó una esta mañana en la que sales tú. Vestido.
me salté el sesenta y ocho, el sesenta y siete, el sesenta y seis...pero tu quema energias hasta el uno que tu mismo nombre indica... seran cosas fortuitas?
:-)
Ay Pumuki, tenerte cerca en esta empresa si que no es fortuito. Gracias por tó!
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