miércoles, agosto 30, 2006

loop

*axial
D a b a l e a r r o z a l a z o r r a e l a b a D

*circular
Hace decenas de años que no escucho ACDC nas de años que no escucho ACDC nas de años que no escucho ACDC nas de años que no escucho ACDC nas de años que…

*helicoidal
Me despierto por la mañana temprano y después de ducharme, me siento en la mesa de la cocina a esperar a que el mi alma, rezagada, llegue al lugar donde mi cuerpo se ha sentado a desayunar. Una hora más tarde ya estoy dibujando. A medio día una pausa -oficial- para prepararme otra taza de té y estirarme un poco. Vuelta al tajo hasta poco antes de las dos, momento en el que bajo a comprar algo para comer: generalmente pollo y ensalada. A veces vienen Gogore o Lereyle y salvo los Martes o Miércoles, Norman come siempre conmigo. Sobre las cuatro me vuelvo a sentar y procuro cambiar de dinámica para tener la sensación de avanzar y de que las ocho horas que me he propuesto no se me hagan eternas. A las ocho apago y me voy. Actividades extraescolares y vuelta a la comuna. Cuando terminamos de cenar es siempre demasiado tarde para terminar la conversación o ver un rato la tele porque quedan sólo ocho horas para que empiece otro día más en el que me levanto por la mañana temprano y después de ducharme, me siento en la mesa de la cocina a esperar a que mi alma, rezagada, llegue al lugar donde mi cuerpo se ha sentado a desayunar.

lunes, agosto 28, 2006

kunst (moderne)

El final de siglo XIX trajo consigo la necesidad de inventar un nuevo lenguaje capaz de redefinir el sentido del arte. La pintura por su parte, llevaba ya tiempo buscando estrategias para recrear el universo tridimensional sobre un plano, pero lo único que se había conseguido hasta ese momento había sido el desarrollo de mecanismos ópticos para la simulación del espacio.

La gran expresividad del color en los trabajos de Munch y Van Gogh agitaría a los Expresionistas Alemanes en los años posteriores. La aplicación del color mediante manchas planas fue el legado de Gaugin, que junto a la geometrización de la forma conseguida por Cezanne, constituyeron los cimientos de lo que conseguirían pocos años después en Paris los Fauvistas, encabezados por Matisse, y que fue lo que más se acercó a esa redefinición del arte que se buscaba.

Pero es Picasso a comienzos del siglo XX quien consigue descomponer la figura en planos que se pueden traspasar a las dos dimensiones del lienzo y desde ahí reestructurar una realidad y ya no sólo limitarse a imitarla o representarla como se había hecho hasta entonces.

Este nuevo lenguaje se llamó Cubismo y constituye el nacimiento de la Modernidad en el arte.

jueves, agosto 24, 2006

ja’ja’ja

Quién iba a decir que los retiros espirituales de las últimas dos semanas iban a sentarme tan bien. He vuelto con el espíritu emprendedor y las pilas recargadas.

En dos días he contestado la correspondencia, deshecho la maleta, desempolvado mi escritorio, lavado la ropa, llamado a la Escuela de Idiomas para matricularme de Alemán uno (y me han dicho que los plazos se cerraron en mayo, así que tendré que comprarme el Assimil por entregas que seguramente se comercializará el mes que viene en tu quiosco más cercano-, carburado el computador, cenado con Walter Cram y hablado de nuestros pasados oscuros (y necesarios) y futuros propósitos para la temporada que va a empezar, pagado las facturas acumuladas, contactado a los Cosmopodernistas, retomado el proyecto, visitado a Walter O´Donell y confesado que de ahora en adelante voy a ser más descarado y como consecuencia, sonreiré más, escribiré más, cantaré más, trabajaré más (rápido), hablaré más, ligaré más, bailaré más, opinaré más, saldré más, más, más, todo más, para ver si (me censuro menos y me revuelco más a menudo y) a finales de año el balance me sale positivo.

Habré empezado tan bien que hoy como todas las semanas quedé con (esta vez para almorzar en un restaurante indio) La Reina y cuando llegamos al momento en el que ella me empieza a decir que ya no tengo edad para andar con tonterías, que a_t_e_r_r_i_c_e, que ponga los pies sobre la tieeeeerra, yo empecé ja’ja’ja_ja’ja’ja y la reacción –el protocolo establece que en ese momento empiece yo a justificarme y a hacerle entender que bla$bla$bla- la sorprendió tanto que empezó a reírse conmigo mientras intentaba convencerme de que tenía razón y era tan ridículo todo que entonces decidió cambiar de tema. Y cuando volvió a juzgarme, yo le pregunté si se había dado cuenta que todos los camareros eran del otro equipo y entonces alarmada me dijo nosequé (pendejada) y yo ja’ja’ja otra vez y ella ja’ja’ja conmigo y lo pasamos estupendamente bien, y nos encantó que el relleno de las samosas tuviera papa y a ella las lentejas con jengibre y a mí el maître (yo que tantas veces le dije a El Auténtico Walter que a mí el rollo étnico no tanto), y después hablamos de las colonias británicas mientras tomábamos el té y bla%bla%bla caminando por la calle agarrados del brazo, riéndonos un poco y yo en el fondo sorprendido de que la cosa estuviera saliendo rodada porque lo único que en realidad estaba pasando era que yo me estaba dejando llevar.

miércoles, agosto 23, 2006

ida y vuelta

se recomienda Brasil -preferiblemente una versión de Django Reinhardt- para acompañar la siguiente lectura:

agosto verano habitación calor polvo maleta armario pijama cepillo de dientes candado tirador calle taxi aeropuerto cola facturación documento de identidad control baño café con leche*esperar imaginar embarcar despegar mirar por la ventana leer dormir comer dormir leer descender pensar aterrizar bajar caminar esperar coger empujar atravesar reconocer abrazar preguntar empujar cargar escuchar respirar mirar por la ventana repostar estirar conducir oler llegar bajar abrir descargar distribuir relajar desempacar doblar guardar salir caminar recordar observar respirar hablar cenar pasear escuchar dormir **mañana ventana olas baño desayuno viento paseo perro playa gris sol viento gente lectura olas calor baño toalla nubes mochila paseo sol casa baño comida sobremesa siesta baño música cartas plataneras calma pueblo café tarde invitación olores belgas cena piscina estrellas camino plataneras casa puerta baño sofá lectura olas luna cama pájaros verde olas terraza novela baño trayecto café perro olas paseo tarde música belgas cena estrellas sofá nubes ventana plataneras desesperación periódico pueblo tertulia aburrimiento visita comida pueblo baño aperitivo café playa terraza puerta baño perro platanera visita paseo playa sesenta y cinco paz cartas noche familia perro comida vino puerta baño pájaros desayuno playa terraza cartas siesta paseo pueblo belgas cena piscina estrellas despedida equipaje ventana noche olas cama**dormir escuchar duchar desayunar guardar cargar cerrar respirar observar recapitular subir arrancar repostar llegar parquear facturar esperar despedirse embarcar despegar mirar por la ventana llorar dormir comer dormir leer descender pensar aterrizar bajar caminar mear esperar agarrar empujar atravesar esperar*taxi autopista ciudad casa baño armario maleta polvo calor habitación verano septiembre

martes, agosto 22, 2006

holidaying

AMOR de hombre; es como llama la gente local a unas semillas negras y alargadas que se pegan a la ropa cuando salgo a dar un paseo/ BARRAQUITO; café con leche servido en un vaso corto y endulzado con leche condensada/ CIGARRILLO; una semana hace que fumé uno/ DIAMANTES; los de la baraja cuando jugamos por las noches/ ESCRIBIR; es recomendable una cara al día, preferiblemente por las mañanas después de desayunar/ FAUNA; sinónimo de familia/ GRIS; es la arena de la (única) playa (que tiene arena)/ HOULLEBECQ; autor de la novela que he estado leyendo porque no hubo manera de encontrar la de Perec/ ISLA; toda rodeada de mar/ JABALÍ; es lo más parecido a un Teckel de pelo duro/ KILOS; los que habré subido en estos días/ LUNA llena; la noche que llegamos al Lomo/ MADRASTRA; la mía me mima y yo la quiero/ NUNCA; digas nunca/ OLAS; se oyen desde mi cama por las noche cuando me voy a dormir. Y por las mañanas cuando me levanto/ PLATANERAS; las que tengo que atravesar para llegar a la playa/ QUESO; blanco y fresco es común por aquí/ RUFO; pequeño, peludo, suave y tan blando por fuera, que se diría todo de algodón, que no lleva huesos (como Platero). Mi fiel compañero este verano/ SONREIR; sé que debería practicarlo más a menudo/ TÉ; una taza por la mañana y una por la tarde, incluso cuando la temperatura supera los treinta grados/ UÑAS; con la humedad del mar crecen a mayor velocidad/ VISTAS; inmejorables cuando tienen el mar de fondo/ (Los) WALTERS; ya tengo ganas de verlos/ YOUR circuit is dead, there´s something wrong. Can you hear me Major Tom?/ ZAPATOS; apenas me los pongo. Ir descalzo y mear al aire libre es lo mejor de unas vacaciones en el campo.

jueves, agosto 17, 2006

Griffiths (Historias Coherentes de)

Se introdujeron en 1984 para reunir las medidas cuànticas en narraciones verosìmiles.
Una Historia de Griffiths se construye a partir de una serie de medidas tomadas màs o menos al azar en momentos diferentes dentro de una determinada escala de valores.
A partir de un subconjunto de medidas se puede definir una historia, lògicamente coherente, de la que en cambio no puede afirmarse que sea verdadera; simplemente puede sostenerse sin contradicciòn.
No obstante, el nùmero de Historias Coherentes que pueden reescribirse a partir de una serie de medidas, es por lo genreal, bastante superior a uno.
sacado de Las Partículas Elementales de Michel Houllebecq

lunes, agosto 07, 2006

fin (de semana)

A todo el mundo le gustaría que los Lunes fueran siempre festivos y levantarse, no muy tarde para evitar los remordimientos, con la enorme satisfacción de no haber tenido que soportar la llamada del despertador.
Abrir los ojos para quedarse un rato mirando el falso techo de la habitación pintado de blanco y las molduras que curvan ligeramente el encuentro entre el paño horizontal y el vertical. Detenerse en el cable y la bombilla de sesenta vatios que cuelga de un rosetón central e intentar recordar las habitaciones en las que uno ha pasado la noche las cinco últimas veces que no durmió en casa.
Habría pasado más de una hora y seguiría deslizándome en línea recta por la frontera entre los sueños y los pensamientos sumido en mi reflexión perezosa.

Escogería una música tranquila para empezar a despertar los sentidos. La flauta, o el oboe que son ligeros y apropiados para repasar la estantería donde están los libros ordenados alfabéticamente y pensar en otras posibilidades de clasificarlos: temáticamente, por género, por tamaño, por color y luego separarlos mentalmente en función de los que ya leí y los que esperan más atención que la que les presté esa tarde en la que tras comprarlos los ojeé distraídamente en un café del centro mientras hacía tiempo para volver a casa.
Bajaría unos cuantos y antes de entretenerme en una lectura distraída y ociosa me prepararía una taza de té. Darjeeling, por su densidad y color sería más apropiado para esas horas, pero escogería el Earl Grey porque me gusta el nombre y el olor me acerca las cosa que deseo y que parecen todavía muy lejanas. Esperaría ansioso a que la tetera empezara a silbar y constataría que es la razón principal por la cuál no me he comprado una de esas eléctricas que usan el norte de Europa para calentar el agua.
Volvería a la habitación y cambiaría la música. Pondría un disco de Bill Evans , Alone seguramente, y me entretendría una vez más leyendo el texto de la contraportada en el que explica porqué se titula así y recordando el día en que lo compré. Ojearía los libros que están tirados por el suelo y cambiaría de posición permanentemente. Iría al baño, reutilizaría hasta tres veces las bolsitas de té (porque cuando son buenas aguantan varias infusiones) y comería manzanas en vez de galletas para no dejar la cama llena de migas, y apilaría los restos sobre la mesita de noche.

Más tarde pensaría en los amigos que me sonríen desde las fotos pegadas con alfileres en la pared que está a la izquierda de la cama -ahora está a la izquierda pero es temporal porque me gusta cambiar la cama de sitio e incluso cambiar el lado en el que duermo con bastante frecuencia para sentirme desorientado cuando me despierto- y me detendría en cada uno de ellos repasando la ciudad en la que viven, la actividad que desarrollan, su estado civil, la última vez que nos vimos y el día en el que fue tomada la fotografía. Me volvería a dormir pensando en lo que haría si me ganara la lotería y al despertar intentaría anotar en una libreta lo que estaba soñando, o algún pensamiento que pudiera parecerme interesante para desarrollar en una redacción como esta. Cambiaría de disco, buscaría palabras en el diccionario, prepararía más té, pensaría en algún buen plan para esa semana (o para el futuro cercano), consultaría el I Ching y recapitularía las cosas más importantes que me ocurrieron desde la última vez que lavé las sábanas.
Pero hoy no es festivo y sobre la ciudad es lunes otra vez.

martes, agosto 01, 2006

exceso

Empiezo a estar cansado de que usted se pasee con tanta frecuencia por este lugar al que yo vengo a depositar mis miedos, mis sueños estúpidos y mis ideas inconexas. Con su presencia me siento obligado a hilarlos cuidadosamente en redacciones elaboradas con el único objetivo de complacerlo.

Nunca pensé que sus visitas terminaran por cohibirme en un territorio que delimité como mío, pero me he dado cuenta que desde hace ya algún tiempo me releo en exceso, me censuro y pierdo demasiado tiempo en intentar darle sentido a mis pensamientos únicamente para que estén a su altura.

Podría marcharme dejando todo esto atrás, pero lo conozco bastante bien para saber que usted volvería a encontrarme. Podría pedirle que no volviera, pero después de todo este tiempo usted me conoce lo suficiente para saber que temo demasiado quedarme solo.

Yo sólo le pido que no siga condenando con su silencio estas palabras que a mí tanto me cuesta escribir.